UN NIÑO, UNA MENTE
En el proceso de aprendizaje intervienen el cerebro, los sentidos, la edad, la carga genética y las emociones, entre muchos otros factores. Todos ellos están coordinados por el cerebro de una forma integral. Es decir, no hay una área determinada que se dedique a una actividad en específico.
Toda la información que le llega sigue una secuencia y luego es organizada y enviada a partes del encéfalo. Ahora bien, ¿Cómo es este proceso?


EMOCIONES Y APRENDIZAJE
El aprendizaje no depende únicamente del cerebro y los sentidos, sino también de los cambios emocionales.
Una carga emotivo dominante puede impedir o distorsionar el proceso de aprendizaje. Por este motivo, debemos educar en torno a un ambiente que fomente el interés y la alegría.
En caso contrario, el lóbulo prefrontal, área encargada del conocimiento, gastará toda su energía pensando una manera de protegerse de la inseguridad que siente.
